Aunque en la Argentina los mercados bursátiles no operaron por el feriado nacional, en Wall Street tanto los papeles de empresas privadas como los bonos de la deuda pública se negociaron y lo hicieron con tendencia positiva. En promedio, se informó una suba del 3 por ciento en las principales acciones de empresas cotizantes en Nueva York, mientras que los títulos de deuda avanzaron un 1,5 por ciento.
Los bonos Globales subieron entre 0,8 y 1,9%, destacándose el GD35 y el GD41 con subas de 1,6 y 1,9%, respectivamente.
Entre los ADR (papeles representativos de acciones de empresas argentinas), Telecom subió 3,3%, BBVA 3,1 y Mercado Libre 2,2%. En cambio, operaron en baja las acciones de Ternium, 2,3%, y Globant, 1,2%.
El riesgo país cedió a 1.491 puntos básicos. Por cuarta rueda consecutiva, el indicador de JP Morgan que mide el sobrecosto de la deuda se ubicó por debajo de los 1.500 puntos.
Entre este martes 9 y el miércoles 10 se efectúa el pago semestral de intereses a los tenedores de títulos de deuda en dólares. En esta oportunidad se agrega, además, el pago de amortización de capital para los de vencimiento más corto (año 2030), por lo cual el Tesoro Nacional asume un compromiso de pago total de 2600 millones de dólares.
Los bonos globales son, precisamente, los que lideraron la suba en Nueva York, lo cual se reflejó en una leve baja del riesgo país. Algunos tenedores de esos bonos, que reciben la devolución del capital por el vencimiento, optan por comprar nuevos títulos de deuda para mantener la inversión, lo que provoca la suba puntual en estos días. Según señalan los especialistas, se trata de un ajuste técnico que no debería interpretarse como una tendencia.
El vencimiento de intereses corresponde al pago de los cupones semestrales de los bonos en dólares emitidos producto del canje del 2020. El pago representa aproximadamente 1035 millones de dólares. De ese monto, unos 680 millones de dólares son por los bonos ley extranjera, mientras que unos 355 millones de dólares corresponden a los bonos ley local. a ello se le suman los vencimientos de cuota de capital por otros 1550 millones de dólares.
Del pago estimado de casi mil millones de dólares, una parte importante (los analistas de mercado lo estiman en un tercio) será acreditado a inversores locales.
La FED no varía las tasas
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, celebró este martes los datos recientes de la inflación y afirmó que si siguen llegando datos buenos se verá más claro cuándo bajar los tipos de interés. Powell afirmó ante el Comité Bancario del Senado que la Fed no cree “apropiado” reducir los tipos de interés hasta que se haya “ganado una mayor confianza en que la inflación se está moviendo de manera sostenible hacia el 2 %”.
Como ya ha hecho en ocasiones anteriores, Powell insistió en que bajar las tasas demasiado pronto podría hacer peligrar el control de la inflación y que hacerlo demasiado tarde podría pesar “indebidamente” sobre el PIB y el empleo.
Por otro lado, el titular de la FED indicó que la actividad económica en los EEUU se desaceleró, pero que aún crece a un “ritmo sólido”, al tiempo que, aunque esté creciendo el desempleo, el mercado laboral “sigue siendo fuerte” y el desempleo es “bajo” en comparativa histórica.
“Los datos entrantes para el primer trimestre de este año no respaldaron esa mayor confianza. Sin embargo, las lecturas de inflación más recientes han mostrado algunos avances modestos”, matizó.
En mayo, el último dato conocido, la inflación bajó una décima hasta el 3,3 % anual, y esta semana se conocerán los datos de junio. “Seguimos tomando decisiones reunión a reunión. Sabemos que reducir demasiado pronto o demasiado la moderación de las políticas podría detener o incluso revertir el progreso que hemos visto en materia de inflación”, añadió.
“Tuvimos siete meses de buenos datos de inflación a finales del año pasado, luego tuvimos un trimestre, en realidad un mes más o menos, en el que la inflación subió y, ahora, hemos tenido una lectura de inflación realmente buena y otra bastante buena. Solo necesitamos registrar otras más para que aumente la confianza”, explicó Powell.
El presidente del banco central estadounidense presentó este martes el informe de política semestral, que se adelantó el pasado viernes, y en el que la Fed afirma que continúa sin tener la confianza suficiente para comenzar a implementar bajadas de tipos de interés, aunque el panorama mejoró gracias a las últimas caídas de la inflación y a un mercado laboral más estable.
Un retraso en el sendero de recorte de las tasas de referencia en los EEUU, que aún se mantiene en el rango de 5,25%-5,50% anual, su máximo nivel en 23 años, es un inconveniente para países emergentes como la Argentina, con un nivel elevado de compromisos en moneda extranjera con el exterior, porque paga más altos intereses, por ejemplo al FMI, cuya tasa varía con la de la Fed, y además le resulta más caro el crédito internacional de otras fuentes.