Max Verstappen no se sorprendió por los problemas del Red Bull de esta temporada en las dos primeras prácticas libres que se realizaron este viernes en el circuito de Albert Park, en Australia. El vigente tetracampeón de Fórmula 1 señaló las graves complicaciones que tuvo con los neumáticos, y dejó muy en claro que, en principio «será difícil solucionar«.
El equipo de Milton Keynes perdió en la pelea contra McLaren, vigente campeón de constructores, y Ferrari por las actualizaciones durante la temporada. Red Bull ya no es aquella estructura dominante de la parrilla como lo fue en 2023. Los serios problemas de equilibrio lastraron su rendimiento a lo largo de la campaña anterior, y posiblemente fueron los grandes culpables de que sufrieran un descenso de ritmo tan alto, aunque realmente fue más tangible en el auto de Checo Pérez que en el de Verstappen.
Max Verstappen ve muy difícil pelear por la victoria en Australia. (AP Photo/Heath McKinley )
Al parecer esos problemas con el equilibrio perece que desaparecieron, o al menos esas son las primeras sensaciones del piloto holandés. No obstante, hay algo que sigue sin permitirles una tranquilidad total, y es que este monoplaza continúa teniendo cositas que deben resolver si pretender regresar a la parte alta de la parrilla.
«El equilibrio ni siquiera estaba completamente desajustado. No hubo grandes problemas de equilibrio, pero de alguna manera el agarre no se activaba y simplemente estábamos sufriendo con los cuatro neumáticos, realmente, en el primer sector y en el último sector. Eso significa, por supuesto, que en este momento realmente no estamos ahí arriba y será un poco difícil de solucionarlo», señaló el holandés volador a SkySports
Max Verstappen no se siente con confianza para ir a por la victoria. (REUTERS/Tracey Nearmy)
Para la tranquilidad de toda la estructura austríaca, en el segundo sector sí que dejó algunos brotes verdes. Era el único punto donde el monoplaza de Verstappen y Liam Lawson mostró algo más de brotes verdes. Pero las debilidades siguen ahí.
Por el momento parece que le va a tocar remar a contracorriente. No obstante, Verstappen dijo que no se vio sorprendido, porque según él ya lo sabían antes de aterrizar en Australia que podrían llegar a tener dificultades. «Tampoco es algo que no esperara cuando llegué acá, así que no estoy ni positivamente ni negativamente sorprendido con el ritmo que estamos mostrando», cerró el holandés.
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