Una legión, y por eso es tendencia por estas horas, salió en defensa de una de las actrices más talentosas y carismáticas que ha dado el espectáculo argentino de proyección internacional, con una larga lista de premios y siendo una de las preferidas de Pedro Almodóvar
Tristemente parece estar naturalizado en la Argentina del presente que cuando un artista o cualquier persona con cierto predicamento mediático dice algo en contra del gobierno de Javier Milei, éste salga a responder con desacreditaciones, mentiras y faltas de respeto a través de su cuenta oficial o bien compartiendo publicaciones de algunos de sus funcionarios que van en la misma línea.
Algo de eso pasó nuevamente en las últimas horas en relación con los dichos de la destacada actriz Cecilia Roth, quien en la semana, en una entrevista, entre otras cosas, había asegurado que en la Argentina de Milei hay hechos de censura, citando algunos ejemplos.
Fue así que el presidente Milei volvió a usar sus redes para atacar a uno de los íconos del cine y de la cultura argentina. “Obviamente para CR es más fácil llorar censura antes que aceptar su fracaso”, dijo en referencia a Cecilia Roth.
La reconocida actriz de trayectoria nacional e internacional dio una entrevista en la que denunció que el Gobierno «censura» y manifestó precisamente su temor por la «naturalización» de que el Presidente «maltrate salvajemente a todo aquel que tenga una idea que no coincida con su pensamiento prehistórico».
“Estoy con @leocifelli (secretario de Cultura de la Nación) y me cuenta que «la gran actriz» Cecilia Roth sólo vende 600 entradas por semana», ironizó Milei por la noche a través de su cuenta de X, donde además agregó: «Por lo tanto, hay que explicarle que no tiene demanda porque no la quieren, no por censura».
De este modo descalificatorio se refirió a las entradas que se venden en el porteño teatro Picadero donde Roth protagoniza La Madre, obra teatral del francés Florian Zeller, junto a un gran elenco de primeras figuras.
En esa misma línea que empleó con otros referentes del espectáculo y la cultura nacional, el líder libertario desconoce o no quiere ver que se trata de una de las actrices más reconocidas, premiadas y destacadas del espectáculo argentino de proyección internacional desde los años 80 cuando se radicó en España con su familia, un exilio forzado precisamente por las amenazas que recibían en su casa y por la censura instalada de parte de la última dictadura cívico-militar.
¿Qué dijo Roth?
“Creo que el Gobierno está censurando. Ni hablar que está censurando, estoy segura. Lo sé, lo veo, lo siento, lo conozco. No se puede hablar sobre la dictadura cívico-militar, no se puede hablar de género, no se puede hablar de cambio climático», disparó Roth durante una entrevista.
“Estamos tragando todo esto. Me da miedo la naturalización de todo, la naturalización de que un señor que está en este momento en el gobierno maltrate salvajemente a todo aquel que tenga una idea, una idea que no coincida con su pensamiento prehistórico”, agregó contundente la actriz.
Esta es la segunda vez que el mandatario usa sus redes sociales para atacar a Roth, de la misma manera que lo hizo anteriormente con Lali Espósito, a la que comenzó a llamar irónicamente “Lali Depósito”, una práctica que luego abandonó cuando la actriz y cantante respondió elípticamente y con brillantes a través de sus últimos videos que se volvieron tendencia y suman millones de reproducciones.
Respecto de Roth, la vez anterior, Milei aprovechó un posteo del dirigente ultraderechista y antiaborto Agustín Laje, aliado del jefe de Estado en su batalla cultural: “Al progre no le entra en la cabeza la diferencia entre censura (que es lo que han hecho ellos con la basura de la cultura de la cancelación) y qué es demanda de mercado. Lo que pasa es que el ladrón cree a todos de su condición”, expresó Milei.
En su posteo, Laje, lejos de hacerse cargo como parte del presente gobierno del desmantelamiento de las políticas públicas con perspectiva de género y de derechos humanos, entre más, había planteado: “Siempre es divertido constatar que la realidad más palpable es exactamente la opuesta a la que la casta cultural cree interpretar”. Luego, hizo afirmaciones poco comprobables sobre las políticas del Gobierno nacional: “Nadie que hable de la dictadura, de género, de cambio climático o que simplemente desee ver una película de Espósito, ha sido amenazado, ni atacado físicamente, ni expropiado, ni asesinado por el gobierno de Milei. Todo lo que molesta a Cecilia Roth, se llama pluralidad, que es una de las consecuencias más importantes de la libertad de expresión”.