Será para toda la vida la tarde de Asunción en la que Racing volvió a la gloria en el plano internacional después de 36 años. El uruguayo Gastón Martirena, que marcó un golazo y le anularon otro vía VAR, fue la gran figura. La rompió Maximiliano Salas, que jugó como un hincha. Casi no hubo rendimientos bajos en el equipo de Gustavo Costas que se entregó y tuvo que sufrir en los minutos finales hasta que llegó el gol definitivo de Roger Martínez.
A continuación, el boletín de calificaciones de Clarín.
Gabriel Arias (7)
Tuvo pocas participaciones, pero apareció cuando lo llamaron a trabajar. En la última de la primera parte, en un momento clave, le atajó el descuento a Villalba. En el gol de Cruzeiro, le tapó una buena a Kaio Jorge, que convirtió en el rebote. Estuvo firme de arriba.
Marco De Cesare (7)
Casi comete un grosero error por una salida fallida y no hizo penal de milagro. Mejoró en el segundo tiempo. Y estuvo cerca de convertir tras una linda jugada individual. Se ganó una buena amarilla cuando los brasileños salían de contra.
Santiago Sosa (7)
Uno de los emblemas del equipo. Son tan buenos sus rendimientos que Víctor Blanco ya avisó que hará uso de la opción de compra por 4 millones de dólares por el 80 por ciento del pase. En Asunción, metió un hermoso pase al vacío para que Salas habilite a Martínez. Y en el complemento realizó un cruce milagroso para ahogarle el empate a Lautaro Díaz.
Agustín García Basso (6)
Una de las grandes revelaciones del equipo. Llegó en silencio y termina el año siendo indiscutido. Puso un largo pase para Salas, que culminó en el gol anulado a Martirena.
Gastón Martirena (9)
Un lateral uruguayo con colores brasileños. «Es Cafú», lo definió Costas. Como de costumbre, hizo un surco por la banda derecha. Marcó un golazo con algo de fortuna porque intentó un centro que se clavó en el ángulo. En el segundo tiempo no se proyectó.
Juan Nardoni (7)
Lo mejor del repertorio de Nardoni asoma cuando Racing se pone en ventaja. Ahí comienza a multiplicarse para recuperar pelotas y tocar. Perdió una pelota que pudo terminar en el empate.
Agustín Almendra (6)
Tal vez al que más le costó la alta temperatura. No pudo tener la pelota ni pesó en ataque. Fue reemplazado por Zuculini a los 10 minutos del segundo tiempo.
Gabriel Rojas (7)
Otro de los que mete como si fuese un hincha. En el primer tiempo fue opción en ataque, pero después se replegó y cubrió bien su sector. Los rivales no atacaron por su zona.
Juan Quintero (5):
Jugó con una molestia en el tobillo y se notó. No se pudo hacer dueño del juego. Tampoco aprovechó las pelotas paradas. Igual, se ganó una ovación cuando lo reemplazaron.
Adrián Martínez (7)
Maravilla es un goleador letal: tiene una y la mete. En la etapa inicial se conectó con Salas, le ganó en el forcejeó a Lucas Villalba y tocó al arco vacío para marcar se décimo gol en 13 partidos en la Sudamericana. En el complemento pidió el cambio por cansancio.
Maximiliano Salas (8)
Tal vez el futbolista que mejor representa a los hinchas por su entrega. El Mencho no da una por perdida y encima, cuando tiene libertades, juega bien. Le metió una enorme asistencia a Maravilla en el segundo de la Academia. Y sobre el final perdió el gol que hubiese merecido.
Bruno Zuculini (6)
Entró para acomodar el mediocampo cuando Cruzeiro crecía. Hizo un buen tándem con Nardoni.
Roger Martínez (-)
No estaba para jugar y se evidenció. Pero Costas lo metió para que le quedara una y no falló: la clavó abajo para el 3-1 definitivo y para la gloria de Racing.