El dólar MEP y el contado con liqui alcanzaron nuevos récord en pesos, justamente un día después que el ministro de Economía comentara, en tono burlón, que «hacen ruido por un dólar a 1300 pesos y es apenas un 10 por ciento superior al valor de hace seis meses». El discurso autocomplaciente del ministro Luis Caputo es insuficiente para explica el salto del dólar de este miércoles: la divisa bursátil, o MEP, llegó a 1330,40 pesos, con un aumento en la jornada del 1,6 por ciento y un incremento con respecto al 20 de mayo, cuando pasó por primera vez los 1100 pesos, de más del 20 por ciento. En menos de 40 días. En tanto que el contado con liqui, saltó un 2,8 por ciento a 1351,80 pesos.
Precisamente, la preocupación de la plaza financiera, y de no pocos observadores políticos, es cuánto durará este raid alcista y a qué niveles llegará. Porque si bien es cierto que, después de una suba inicial de los dólares financieros a mediados de enero, el precio se mantuvo a partir de allí oscilando entre los 1000 y 1040 pesos (dólar MEP) por lo menos durante marzo y abril, al mes siguiente el clima cambió.
La agitación en el mercado de divisas se inicia a partir del 20 de mayo, es decir hace hoy un mes y una semana. Presumiblemente, muy vinculado a los acontecimientos políticos internos, al menos en el impacto inmediao. Pero más profundamente, por las dificultades en la obtención de divisas que empezaban a hacerse evidente en el gobierno, al menos para la determinación de la tendencia de mediano plazo para el valor del dólar.
Ni las conversaciones con el FMI, ni el fluido e intenso contacto de Javier Milei en sus viajes al exterior con las empresas más poderosas del mundo, ni las liquiidaciones de las exportaciones, le han rendido al gobierno en materia de dólares ni mínimamente para la obtención de divisas, ni siquiera en su hipótesis más pesimista.
De ello da cuenta que este miércoles el Banco Central haya tenido un saldo negativo en el mercado mayorista de divisas (MULC), con ventas netas por 76 millones de dólares por la escasa liquidación de los exportadores.
«Continúa la tendencia alcista del dólar». «Mayor presión sobre el tipo de cambio». Los títulos de los comentarios bursátiles publicados por las agencias de liquidación y compensación (alyc) de operaciones, es decir los operadores en el mercado, reflejaron este miércoles la preocupación central en el sistema financiero.
El balance del mes para el Banco Central, cuando falta apenas media semana para concluir (dos días si se mide por las operaciones de mercado abierto, tres si se toma en cuenta el conjunto de operaciones que afectan a las reservas, ya que la información se entrega con un día de diferimiento), muestra por ahora intervenciónes con saldo a favor de menos de 40 millones de dólares desde el inicio de junio, y un saldo de reservas internacionales que apenas supera en 100 millones al del cierre de mayo.
Muy escaso, teniendo en cuenta que julio viene con vencimientos de deuda en divisas muy fuertes. El día 9, vencen en total 2558 millones de dólares por el pago de capital y cupón de intereses de los diferenrtes bonos del canje de deuda del año 2020 con el sector privado. Además, hay otros vencimientos en las semanas siguientes del Bopreal (que es deuda del Banco Central) y compromisos con distintos organismos financieros (incluido el FMI) que suman unos 2000 millones de dólares adicionales, a abonar en divisas.
Deuda en pesos
La Secretaría de Finanzas anuncia que en la licitación de este miércoles adjudicó títulos de deuda en pesos por $8,4 billones, habiendo recibido ofertas por un total de $15,1 billones. Como el Tesoro Nacional enfrenta vencimientos por 5,7 billones esta semana, quiere decir que de la presente licitación le quedan fondos excedentes a aplicar a otros fines. En este caso, se informó que ese margen extra «será utilizado para comprar los dólares necesarios para pagar los próximos vencimientos de deuda en moneda extranjera durante el mes de Julio».
Del total de bonos adjudicados, la mayor parte corresponde a letras de capitalización (Lecap) con vencimiento el 30 de septiembre (6 billones) y 13 de diciembre (2,2 billones) del corriente año. El resto (0,2 billones) se colocó en títulos Dolar Linked (vencimiento 13 de diciembre del año próximo), que se actualiza por el dólar oficial. Quedaron desiertas las licitaciones de los dos bonos más cortos (Lecap para el 26 de julio y 30 de agosto, respectivamente).