En el tramo final del debate sobre la Ley Bases y el proyecto fiscal, el gobierno de Javier Milei le dio prioridad a la reposición del Impuesto a las Ganancias y la reforma en Bienes Personales tras quedarse sin margen para revertir en la Cámara de Diputados los otros cambios que hizo el Senado en temas como las privatizaciones, y verse urgido por tener finalmente su primera ley.
Ese es el panorama que quedó planteado de cara al plenario de comisiones que se reunirá este martes a partir de las 15:00, donde el oficialismo busca firmar los dictámenes de mayoría que dejarán habilitada la votación y también la aprobación final en el recinto el jueves. Para ello, se sabe, el oficialismo necesita sí o sí de los bloques más dialoguistas de la oposición.
Las bancadas del PRO, UCR, Hacemos Coalición Federal, Coalición Cívica e Innovación Federal – que reúnen 101 votos clave frente a los 103 del kirchnerismo y la izquierda- le darán ese respaldo final al Gobierno, pero limitado respecto de la pretensión oficialista de dar vuelta todas las modificaciones que introdujo el Senado.
Aún con algunas diferencias internas, todos están dispuestos a respaldar la versión anterior de Ganancias y Bienes Personales que el Senado rechazó y dejó afuera del paquete fiscal, pero en la Ley Bases se inclinan mayoritariamente por dejarla como llegó, es decir, sin la privatización de Aerolíneas Argentinas, el Correo Argentino y Radio y Televisión Argentina (RTA), entre otras modificaciones que se hicieron.
El Gobierno intentó destrabar el tema en la reunión que mantuvieron el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, y la secretaria de Planeamiento Estratégico, María Ibarzabal, con los jefes de los bloques el lunes por la tarde y hasta la noche. Sin embargo, la resistencia que encontraron les complicó el panorama y el oficialismo prefiere ir a lo que parece más seguro y es, además, lo más importante para la gestión económica.
Ley Bases y paquete fiscal: ¿por qué el Gobierno debió priorizar Ganancias y Bienes Personales?
El problema de fondo es que luego de la agónica aprobación del Senado, que se dio por el desempate de Victoria Villarruel y que aún así no logró contener el rechazo del arco opositor a la restitución de Ganancias y la rebaja en Bienes Personales, los diputados solo pueden aprobar lo que envió la Cámara alta o desecharlo e insistir así en lo que ellos aprobaron el 30 de abril.
Complicado con las privatizaciones para la sesión del jueves, el Gobierno puso por delante la reforma de los impuestos a Ganancias y Bienes Personales
Con esa limitación reglamentaria, el oficialismo se ve atado a la voluntad de la oposición dialoguista para revertir lo hecho por el Senado y lo que menos divisiones genera en ese sector es el tema impositivo, sobre todo porque interesa mucho a los gobernadores que se beneficiarán por la reposición de Ganancias con un piso de $1,8 millones de pesos de sueldo bruto para trabajadores solteros y de $2,2 millones para casados con dos hijos.
El oficialismo cuenta con que los gobernadores de la UCR y el PRO presionen hasta último momento sobre sus bloques para acompañar al oficialismo en este punto y también en la suba del mínimo no imponible de Bienes Personales a $100 millones (hoy es $27 millones) que, si aunque implicaría una baja en la recaudación, la gestión de Milei lo considera clave para que funcione el blanqueo de capitales.
El bloque Hacemos que comanda Miguel Pichetto y que juega en tándem con Innovación Federal también tiene terminales en las provincias que juegan a favor de revertir esos cambios que hizo el Senado en el proyecto fiscal y el mismo factor divide por estas horas a los diputados de la UCR que lidera Rodrigo de Loredo.
El sector más díscolo del bloque, unos diez diputados, no quiere revertir ninguna de las modificaciones que hizo el Senado pero «los que tienen gobernadores arriba, van a acompañar el tema Ganancias por lo menos», según una de las fuentes consultadas. Esto los reduce y alejaría el peligro para el oficialismo en torno al paquete fiscal.
Privatizaciones, afuera: ¿qué pasa con los cambios que hizo el Senado a la Ley Bases?
La primera señal de que el Gobierno entendió su limitación para deshacer todo lo que se hizo en el Senado y priorizó la cuestión impositiva fue la convocatoria a las comisiones, dado que antes de la reunión de los funcionarios con la oposición dialoguista ya se había convocado para este martes al plenario de comisiones para tratar la Ley Bases pero no el paquete fiscal.
Ese llamado se demoró algunas horas porque el oficialismo esperó a ver cuánto apoyo reunía para asegurarse Ganancias y Bienes Personales antes de formalizar el llamado al debate de comisiones, algo que no hizo con la Ley Bases, tal vez porque entendió que con ese proyecto ya no tenía más margen y que ahora queda en manos de los diputados.
La Ley Bases quedaría como la dejó el Senado, sin la privatización de Aerolíneas Argentinas ni cambios en la moratoria fiscal
Y es que el escenario para uno y otro parece muy distinto. La mayor parte del bloque de Pichetto ya había resuelto aceptar todos los cambios del Senado a la Ley Bases, que además del tema privatizaciones incluye la eliminación del capítulo que reformaba la moratoria previsional, antes de la reunión con Rolandi e Ibarzábal.
El argumento central fue que todos esos puntos fueron «retirados del dictamen» antes de la votación y que, por ende, la Cámara alta ni siquiera los votó. En el bloque de la UCR varios comparten esa mirada y se distancian de De Loredo, que el fin de semana expresó su apoyo a volver a incluir la privatización de Aerolíneas Argentinas.
Los radicales están divididos. Un grupo de unos diez diputados comparte la postura del bloque de Pichetto de «aceptar lo que hizo el Senado en la Ley Bases y solo abrir la discusión en paquete fiscal» para revertir los cambios en Ganancias y Bienes Personales», según precisaron a iProfesional fuentes de la bancada.
A eso se le sumó que la bancada del PRO se inclina por «dejar afuera Aerolíneas» con el argumento de que «es algo que negoció el Gobierno en el Senado para conseguir los votos», según explicó una fuente de ese espacio a iProfesional a pesar de que el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, desconoció ese entendimiento hace algunos días.
El Gobierno, urgido por sacar su primera ley
De mantenerse estas posturas, el oficialismo no lograría tener en la versión final de la Ley Bases las privatizaciones que quería. La lista de empresas ya se había visto recortada de 41 a 9 durante su paso por Diputados y, tras la eliminación de Aerolíneas Argentinas, Correo Argentino y RTA, quedó en seis, entre las cuales se encuentran AySA y Sociedad Operadora Ferroviaria (SOFE).
Sin embargo, como contó iProfesional cerca de Milei tienen en carpeta la posibilidad de insistir en el futuro con las privatizaciones que quedaron truncas mediante nuevos proyectos de ley. La prioridad hoy para el oficialismo es lograr el avance final de la Ley de Bases y el proyecto fiscal casi como sea para avanzar con la organización del «Pacto del 9 de Julio».
Milei necesita cerrar el debate de la Ley Bases y tener el primer «hito» de su gestión a casi siete meses de haber asumido
Milei necesita tener el primer «hito» real de su gestión a casi siete meses de haber asumido y también sus alfiles políticos, en especial Francos que se ocupó de la mayor parte de las negociaciones. En la oposición, en tanto, remarcan que con más o menos cambios también quieren «cerrar el tema Ley Bases el jueves y pasar a otra cosa de una vez».
En ese contexto, en el tramo final del debate sobre la Ley Bases y el proyecto fiscal el gobierno de Javier Milei prioriza temas como Ganancias y Bienes Personales para aprobar la versión más útil posible con las limitaciones que le imponen su posición minoritaria en el Congreso y una oposición que, pese a su voluntad negociadora, no deja de condicionarlos.