El fiscal del caso intenta determinar cómo ocurrieron los hechos y por eso busca más testigos.
Luego de que se conociera la noticia del trágico del accidente en la autopista Panamericana, en el que murieron una mujer de 44 años y su hija de 10, la Justicia ahora busca establecer cuál fue el motivo del choque.
El fiscal del caso, Gastón Larramendi, sostuvo que hasta el momento lograron establecer una posible causa del dramático suceso gracias a la declaración de los testigos. “Fue una larga jornada porque se trató de un hecho confuso al principio”, explicó.
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“Fue un Peugeot 206 que chocó contra el camión, que pierde el control y va desde el carril lento al rápido donde impacta contra el Toyota Corolla. A raíz de la maniobra, para contener la carga, se quebró el brazo izquierdo”, detalló.
Además, el fiscal indicó que la parte trasera del camión se perdió por el movimiento brusco que hizo el conductor. Luego chocó contra el guardarrail, se desprendió y cayó encima de otro auto Toyota Corolla. “De este vehículo resultaron las dos personas fallecidas: una mamá de 44 años y su hija de 10. Un nene de 12 que iba en el asiento trasero sobrevivió”, explicó Larramendi.
“Se están recabando las cámaras de seguridad de la zona. El chofer del camión está bien, fuera del peligro y durante la noche dio testimonio”, destacó y solicitó: “Aunque, en principio, ya tendríamos cómo ocurrió el hecho, todo puede variar y por eso pedimos que los testigos se sigan acercando a las comisarías”.
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Una familia destruida por el choque en la Panamericana: quiénes eran Sol Quirno y su hija de diez años
Sol Quirno es quien manejaba el auto que quedó aplastado por el contenedor de un camión. La mujer murió en el acto, al igual que su hija Camila, que se encontraba en el asiento de atrás. Nicolás, el mayor de los dos hijos, logró sobrevivir al impacto.
La mujer tenía 44 años y vivía en la Ciudad de Buenos Aires. Es familiar lejana de un funcionario del gobierno. Estaba casada con Federico, un reconocido empresario que no estaba en el momento en el que se produjo el accidente y que llegó apenas unos minutos después, una vez que conoció la noticia.
Quirno formaba parte desde hace 12 años de una empresa familiar llamada “Quirno Costa propiedades” que se dedica al rubro inmobiliario y que tiene dos sedes: una en la localidad bonaerense de Ituzaingó y la otra en el microcentro porteño.